Hierbas para el alma
Realizar acompañamientos continuos que permitan la posibilidad de usar la palabra acertada, dulce, amable, benevolente, compasiva; con una voz que vibra en tonalidad de amor.
Es la mejor medicina para acelerar procesos donde se garantice una verdadera comunicación entre los diferentes agentes educativos.
Se pretende con esta dinámica:
Diálogos reflexivos a través de una escucha consciente.
Entregar sugerencias que apoyen el compartir cotidiano y se pueda vivir atendiendo a una constante rítmica de aceptación por cada evento experimentado.
Pensar dentro del pensamiento para evitar roces innecesarios, enfrentamientos inútiles; cuando pensamos antes de hablar vamos a confiar todo el tiempo que lo que ocurre, trae consigo un aprendizaje vital.
Mantener una dinámica de confianza en sí mismo y en los que nos rodean, que permitan valorar que el Ser Humano es un gran potencial para la evolución de otro ser humano, por eso somos familia y por eso no ha sido casual que hayamos llegado al lugar donde elegimos venir con el único propósito y de evolucionar en compañía de los otros.
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